martes, enero 17, 2006

Vuelta de vacaciones

Libros y más libros. Me terminé "Artemis Fowl: La Venganza de Opal", de un autor llamado Eoin Colfer. Es el cuarto tomo de una serie sobre un pequeño y malvado niño que quiere conquistar el mundo. Nada mala la idea. Lo curioso es que al leer los primeros libros, cuando el niño es malo (de verdad malo) como que uno no agarra bien la lectura. Pero luego, a medida que el niño comienza a "abuenarse" uno le comienza a agarrar cariño.

Luego de eso me leí "Buenos Presagios", un libro un tanto ambicioso que le busca el lado humorístico al apocalípsis. Es choro, pero tiende a complicarse con líneas narrativas mal amarradas o que definitivamente sobran.

De ahí, para seguir con el autor anterior (Neil Gaiman y no Gayman) me leí "Stardoust", esta vez más entre que serio y fantasía. Es bien bonito el libro. Cuenta la historia de un niño medio duende que se pega un viaje a su tierra natal (el mundo de las hadas) y se enamora de una estrella (en el mundo de las hadas las estrellas son minas ricas).

Por si lo anterior fuese poco, entré a leer "Cántico de Sangre" de Anne Rice (o Anita Arroz). Es la última entrega de las crónicas vampíricas (esas de Entrevista con un Vampiro). No es malo el libro, pero tampoco es excelente. Como que con leerse el primero uno tiene de sobra con el mundillo. Pero en fin.

Bueno, se acabaron las vacaciones. Mucha lectura, playa, piscina, un paseo a La Serena, Andacollo y a Playa Blanca. Todo lindo. Pero corto. Muy corto. Se pasó volando la semana. Por lo menos se me hubiera pasado más volando si hubiese estado trabajando.

Ahora, continúo con Harry Potter y el Príncipe Mestizo. Tengo la versión original el Inglés, de haaaaaartas páginas, así que tengo lectura para rato.

Y ahora, me marcho a Aikido, a herir mis rodillas y decir para mis adentros "I'm too old for this sh*t".

:D

lunes, enero 02, 2006

Feliz año nuevo

Año nuevo. Se viene el 2006. Me caso, no fumo y entré a Aikido. Atrás quedó el diplomado.

¿Qué pasará?

Este año se viene bueno. Voy a tener hartos cambios en mi vida, y aunque se pueda llegar a hacer complicado, seguro se viene bien interesante.

Mi tío Guido, que espero se encuentre en el paraíso, disfrutando de todo lo que se pueda disfrutar por esos lados, decía con respecto a mi familia que puede que a uno no le guste, pero uno nunca se aburre.

Eso espero este año. Sé que vienen cambios, y puede que no me gusten, aunque espero sólo no aburrirme. Con eso me doy por pagado.

Un abrazo grande y feliz año nuevo.