Dejar de Fumar: Día 9 La Serena

Es como complicado escribir en laptop. Las teclas están más apretadas y algunas cosas se encuentran en lugares distintos. "None the less"... sigo escribiendo. Hoy es domingo, no me he fumado ningún pucho y comienzo a sentir cierto escozor en la piel, producto del intenso sol que parece cobijar las tardes de la cuarta región. Las mañanas, en cambio, parecen de invierno.

Big news... Resulta que mi hermano pecó. Se fumó un pucho el tercer día. Maldito. Se fue a la casa de un amigo y allí, escondido, traicionó el acuerdo de no fumar. Igual no da para una crísis diplomática, pero eso de traicionar un acuerdo suena choro.

Junto con aprovechar el sol y todo eso, estoy leyendo. Es una de las cosas que me gusta hacer cuando estoy de vacaciones. AUnque parece que no es una actividad tan popular, porque en la playa no se ve mucha gente leyendo.

Los Días del Venado:
Una novela chora, con un toque autóctono notable. Se supone que es de un lugar onda sudamericano, en la antiguedad, donde unos tipos llegan de otro continente montados en animales con cabellera sobre el lomo y con armas que suenan, hechan humo y hieren a sus enemigos, pero sin que quede una flecha en la herida. Es de ediciones Norma, de una tipa que aparentemente es colombiana y se llama Liliana Bodoc.

El Circulo de Fuego:
Lo inicié y terminé hoy. Es de una niña bruja que está en la escuela, y el primer día de clases, onda en segundo medio, encuentra que hay un alumno nuevo y que este tiene poderes mágicos como ella, como su abuela, pero que a diferencia de ellas, este tipo no sabe lo que tiene ni sabe cómo controlarlo. Entre ambos se las arreglarán para enfrentar una maldición que pesa sobre la familia del chico y entre tanto, ver si logran desatar y controlar los poderes ocultos que tiene.

Es harto entretenido. Livianito, fácil de leer, sencillo. Y lo choro es que tiene 2 narradores. La chica y el chico, que hablan en primera persona. Ahí donde comienza uno, termina de hablar el otro, y eso demarca cada capítulo. Bonito. Bien hecho.

Es de una mina que se llama Marianne Curley. Inglesa parece.